lunes, 16 de marzo de 2009

Las tres Pés de la Creatividad


Érase una vez un búho que desde su árbol observaba curioso la actividad de los pueblos de la comarca. Veía cómo poco a poco se quedaban sin humanos, cómo aquellos que aún permanecían, cada vez hacían menos cosas juntos, y cómo la gente joven pasaba cada vez más horas delante de los ordenadores y cada vez menos jugando en las calles.

Un grupo de grullas le contó que por tierras del Sur, la pasada migración existía una comarca rural llamada “Creatividad”. Las gentes de esa tierra cada día vivían mejor y sus pueblos cada vez estaban más poblados de parejas, jóvenes, niños, niñas y, por supuesto, de las personas mayores del lugar, que parecían renacer viendo como se llenaban de vida de nuevo sus pueblos.

Alarmado ante la situación de su comarca e inquieto por conocer aquella otra llamada “Creatividad” decidió extender sus alas y emprender un viaje al Sur.
Lo había estado pensado muchas noches y llegó a la conclusión que había que intentarlo. Por duro que fuese el viaje, el secreto de “Creatividad” podría servir para mejorar la calidad de vida de las personas, animales y bosques de su comarca; y así evitar, entre otras cosas, que la gente joven quisiera irse a las ciudades.

El viaje fue largo y por el camino observó cómo su comarca no era la única que presentaba esa triste situación, el mal afectaba a un territorio mucho más amplio. En los momentos de duda se preguntaba ¿existirá de verdad “Creatividad”? Y si existe ¿cómo la reconoceré?

Pero las respuestas a sus preguntas surgieron por sí solas. Un día escuchó desde el aire un sonido que casi había olvidado: el llanto de un recién nacido. Cuando lo reconoció, decidió acercarse al lugar pero según se acercaba escuchó nuevas voces: niñas y niños reían mientras un grupo de mayores les contaban historias del lugar. Era tal la cantidad de colores, olores, personas, animales, etc. que veía que casi se llegó a marear, de tanta felicidad que respiraba. Esto huele a “Creatividad”, pensó.

Mientras aleteaba para reducir la velocidad de aterrizaje preguntó a las personas que allá estaban dónde podía encontrar a alguien que le contara cómo se había conseguido ese milagro de “Creatividad”. Estas corrieron a llamar a la Señora Lechuza, que en cuanto supo de la llegada de este sorprendente visitante acudió a su encuentro y le invitó a su casa.

Estuvieron largos días hablando y la Señora Lechuza estuvo encantada de compartir su sabiduría y experiencia.

Estos son los consejos que el ilusionado Señor Búho se llevó de vuelta a casa para contarles a los humanos:

Recuerda las tres Pés:

1. Pensamiento Individual: todas las personas podemos ser creativas y todas tenemos un pensamiento propio, todas las opiniones son válidas y respetables.

2. Participación colectiva: es necesario que las ideas individuales se trabajen de manera conjunta. Para ello debes reunir a gente diversa con quién buscar soluciones. Hombres y mujeres, mayores, jóvenes y niños, de aquí y de allá, con estudios o sin ellos, etc. deben dialogar juntas.

3. Paciencia: las soluciones no son fáciles ni inmediatas, para conseguir un proyecto sólido y que pueda tener futuro hay que tener presente que hay un proceso de gestación, desarrollo y crecimiento previo; antes de ver los frutos hay que conseguir fuertes raíces.

Arantxa Rodríguez
Europe Direct de Cederna Garalur